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Objetivo: Riesgo subjetivo

Objetivo: Riesgo subjetivo

El significado que se dé a un objeto o situación dependerá de la relación que tiene el sujeto con ese objeto o situación. Por ejemplo, una herramienta tiene un significado diferente para un operario, un ingeniero o un psicólogo. El significado se manipula, se selecciona y se transforma según la situación en que se vea involucrada la persona. Y con el riesgo laboral, ¿sucede lo mismo?

Si me preguntan por el riesgo laboral y su relación con el factor humano, no dudaré en responderles que una cosa es lo que significa el riesgo para el “experto” y otra diferente lo que significa para la persona que está a diario expuesto a él. ¿Qué diferencia hay?. Para entender una definición de lo que es el riesgo subjetivo debe ser atendida desde aspectos personales, sociales y culturales en los que el empleado desarrolla su tarea. Es decir, unas condiciones de trabajo y una adaptación a estas. Tres cuestiones importantes a la hora de considerar el riesgos desde el factor humano y los condicionantes citados, las tenemos en la voluntariedad de los actos de éste, la inmediatez o demora de los efectos de la conducta y por supuesto, con un peso muy importante, la credibilidad de los agentes participativos y significativos para el empleado (p.e. mando intermedio). ¿Es posible que un trabajador entienda de la misma forma un riesgo si se expone voluntariamente a él o si está “obligado” a hacerlo?. ¿Es lo mismo para el trabajador las conductas voluntarias que las impuestas para realizar una tarea?. Las hojas de instrucciones y procedimientos de trabajo, ¿En qué categoría se encuentran: “invitación” a conductas voluntarias o “impuestas” por falta de participación en el desarrollo de las mismas?.

Un riesgo puede significar cosas diferentes según personas, contextos e incluso “momentos organizacionales”. Y no sólo esto, sino que además la subjetividad del riesgo desde el factor humano tiene en consideración las posibles pérdidas, su significado y una gran incertidumbre que rodea a todo ello. Un empleado, consciente o “inconscientemente” (derivado de la experiencia) baraja posibilidades de actuación, llamémosle coste-beneficio por cada actuación en materia preventiva. Y lo hace recurriendo a una comparación con el grupo de trabajo o personas significativas para éste. ¿Qué me sucederá “yo empleado” si elimino una sistema de seguridad durante unos minutos para acortar el proceso de trabajo?. “El sistema pensante” coste-beneficio determinará las posibles pérdidas y lo que significan para el empleado. Si lo ha hecho en alguna otra ocasión y no ha sucedido nada o si lo ha visto hacer a otros y no les ha sucedido nada. Pero no se trata sólo de esta cuestión comparativa (que no es poco) sino además de los niveles de incertidumbre que le genera a un empleado el riesgo y sus consecuencias en función de la conducta emitida. De manera gradual, partimos de la ignorancia completa (no existe información ni formación en materia preventiva), pasamos a la ambigüedad (existiendo -in-formación), pero siendo la primera vez en la que nos encontramos con este riesgo, hasta llegar a la objetividad completa alineada ésta con la del técnico experto en prevención de riesgos laborales.

¿Y qué decir de lo que significa para la organización un riesgo tolerable?. Sencillamente, lo que para el técnico experto supone lo tolerable del riesgo, para el empleado tiene un significado de aceptación. Es decir, el riesgo objetivo es tolerable, pero ese mismo riesgo desde la subjetividad del empleado se “reduce” a ser aceptable. Un empleado no tolera el riesgo, lo acepta y con ello toma las medidas preventivas para evitarlo. Incluso, un riesgo evaluado como tolerable, el empleado no lo acepta como tal y se desentiende de dichas medidas preventivas. Se trata de un aspecto muy importante desde el factor humano, y es que no se debe dar por hecho que existe una única evaluación del riesgo. En caso de que defiendan la idea de que sólo hay una única interpretación del riesgo, ¿cómo pueden explicar las conductas de riesgo?. ¿En qué cabeza cabe la posibilidad de considerar un riesgo como subjetivo?. En mi opinión, en tantas cabezas como acciones razonas pudiesen existir. Es decir, expectativas y valor del resultado de las conductas emitidas. Imaginen a un empleado que considere que la seguridad laboral no es importante y que lo único por lo que le evaluarán será por los resultados, y no la forma de conseguirlos. Imaginen a un supervisor que refuerce esta idea. ¿Es razonable pensar que dicho empleado considere el riesgo de manera subjetiva?

Como indico en el taller “Técnicas psicosociales para la prevención de los accidentes laborales”, el riesgo subjetivo es la probabilidad de que un trabajador sufra un accidente derivado de la tarea que está realizando en función del estímulo (tipo de tarea) y las diferentes respuestas del empleado a nivel cognición, emoción y conducta. En función de todo ello está el interés que tenga el mando intermedio por la seguridad y salud de las personas de su equipo.

Fco. Javier Herrán Gamarra

Psicólogo-Consultor de Recursos Humanos, Seguridad y Salud laboral.

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Imagen tomada de freeimages

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